Séneca - Cartas Morales a Lucilio
Carta XVIII
Esparcimiento del sabio
"...siguiendo el precepto de algunos hombres, te ordenaré que de vez en cuando, durante unos cuantos días, te consueles con comida escasa y grosera, con indumentaria basta y ruda, diciéndote:¿Esto es aquella cosa tan temida?. El alma, cuando se encuentra en terreno seguro, debe prepararse para las dificultades".
"Aquel gran maestro del placer, , Epicuro, señalaba ciertos días en los cuales satisfacía el hambre con míseros manjares a fin de ver si le faltaría algo para el pleno y perfecto goce, o cuando le faltase, si valía la pena resarcirse con tantos trabajos."
"Sólo es digno de Dios quien ha menospreciado las riquezas y no es que pretenda prohibir la posesión de éstas, antes bien procúratelas sin sobresaltos, cosa que no conseguirás sino persuadiéndote de que también vivirías feliz sin ellas si las considerabas siempre como huidizas"
